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ARTÍCULOS DE CÁDIZ COFRADE 

 
   Vestir el hábito nazareno... 20 años después.

   La hermandades están inmersas durante estos días en la entrega de papeletas de sitio, controles de salida y reparto de túnicas y hábitos para poder conformar un cortejo digno y acorde a la estación penitencial que llegará, si Dios quiere, y el mal tiempo no lo impide, en escasas semanas. Unas comitivas nazarenas  que siempre llevan hasta los mentideros y tertulias cofradieras el manido tema de la crisis de penitentes, si bien la conclusión siempre es la misma por muchas vueltas que se le quiera dar: la escasez de penitentes es clara y evidente, a pesar de ciertos repuntes en ciertas corporaciones.

   Para puntualizar sobre este tema y que los lectores puedan tener de primera mano los datos fehacientes al número de hermanos de fila de cada corporación, hemos querido presentar, con la ayuda de la hemeroteca local, un pequeño estudio estadístico con los datos de aquellos cofrades que vistieron su hábito penitencial en la ya lejana Semana Santa de 1991, teniendo en cuenta, eso sí, que hablamos de un año inmerso en una década histórica y dorada del Cádiz cofradiero.

   

   Para situarnos en 1991, recordamos, por ejemplo, que las hermandades de La Piedad y Nazareno estrenaron paso de misterio, la Virgen de Buen Fin el manto de salida granate y en la nómina de hermanos mayores estaban los reconocidos José Blas Fernández en Piedad, Alfonso Caravaca en Sentencia, Antonio Lucero en la Palma y José Luis Suárez en el Nazareno, entre otros. Algunas juntas de gobierno apenas han cambiado en sus principales cargos dos décadas después, y el Presidente ya era entonces el infatigable Rafael Corbacho.

   Hablaremos a partir de ahora de dos cifras, de dos fechas claves en nuestro estudio, 1991 y 2010. A diferencia de lo que puedan pensar los cofrades amantes de la estadística, sólo cuatro hermandades han aumentado desde aquel año sus filas nazarenas: Expiración, que es la que más ha crecido, de 135 a 200 hermanos de fila, Vera Cruz tenía 190 y ahora dispone 220 penitentes, Piedad que ha pasado de 150 a 180 nazarenos y las Aguas, que ha aumentado en 5 integrantes, de 225 a 230.

   El caso más curioso es el de la Sagrada Cena, que mantiene los mismos 180 penitentes de 1991, aunque durante estos veinte años han tenido épocas de aumento y reducción del cortejo -ahora, en este caso, vive un momento de auge-

   El siguiente grupo de hermandades se han mantenido en una horquilla similar, con pequeñas pérdidas que no pueden catalogarse de importantes: Angustias, sólo pierde 6, de 231 a 225, Buena Muerte, una decena, de 180 a 170, Servitas disminuye en 15, de 120 a 105 siervos, Cigarreras, de 270 a 250 hermanos, Afligidos, de 200 a 172, Sanidad, de 154 a 120, Prendimiento, de 190 a 138 nazarenos, Nazareno del Amor, que de los 346 han pasado a los 300, Sentencia, que de 300 han pasado a procesionar 250 y Siete Palabras, que si bien ha perdido 45 hermanos de fila, el que se haya quedado de 120 en 75 penitentes, la conduce a su integración en el grupo que denominaremos cofradías con 'sangría' penitencial, al igual que la Soledad, con 200 integrantes con hábito en 1991, y que ha pasado a 145 en 2010.

   La otra mitad de las cofradías si han tenido lastimosamente pérdidas más relevantes, aunque un primer grupo lo conformarán las que han reducido en menor cuantía sus filas nazarenas. Las Penas, de 200 a 140 hermanos, Ecce-Homo, de 180 a 115, Jesús Atado a la Columna, de 230 a 160 penitentes, La Palma, de 300 a 220 integrantes, y las que han disminuido en un centenar de hermanos en el cortejo, Oración en el Huerto, de 300 a 200, Caído, de 350 a 250, la Congregación Ecce-Mater Tua, de 400 a 300 (quizás sea actualmente el cortejo más amplio de la Semana Santa, y curiosamente fuera de la nómina de hermandades y cofradías), y la más hiriente, Descendimiento, de 180 a 80 hermanos.

   A partir de aquí, los números negativos son mareantes en algunos casos. No obstante, algunas de las hermandades continúan presentando en la salida procesional dignísimos cortejos, aunque hayan perdido numerosos nazarenos en las respectivas comitivas. El Perdón, de 300 hermanos, saca 145 en la actualidad, La Paz, de los 450 han pasado a procesionar 275, Humildad y Paciencia, de 400 a 220, y cierran curiosamente las dos hermandades que más arraigo y devoción arrastran, Nazareno, de 350 a 150 hermanos,  y Medinaceli, de 600 a 170 -nada menos que 430 hermanos han desaparecido de sus filas-. En total, 2016 penitentes menos, a los que evidentemente habría que restar los 120 del Despojado. 

   Si bien se ha reducido la población de manera importante, sobre todo en el centro de la ciudad, donde radican la gran mayoría de las corporaciones, y algunas de ellas han resentido los horarios tardíos, habría que estudiar con calma cuáles son las causas que han llevado a más de 2000 cofrades a no vestir el hábito de su hermandad. Muchos ya no están con nosotros. Otros se han marchado de la ciudad. Un buen número ha pasado de la actividad frenética de todo un año a la pasividad de ser un mero espectador. Otros vestirán hábitos de hermandades en otras localidades que no viven y sienten desde su infancia y adolescencia, y sin embargo renuncian a la suya de pequeño, con la que han crecido cofradieramente... 

   Quizás una solución esté en arrimarse más a los hermanos de número, a aquellos que no se asoman durante el año por la casa hermandad -sus razones tendrán- y que posiblemente necesiten un empuje para que participen y se involucren. Por buen camino va la Sagrada Cena, que acerca a los colegios los interiores de la hermandad, y que motivan a los suyos a participar vistiendo el hábito. Otras viven en el ostracismo y de subvenciones, sin darse cuenta que 'sangran' por dónde más duele.  

   Como comentario final, animamos desde aquí a todos los cofrades que dejaron su túnica en el desván del olvido a que la recuperen, a que la vistan con orgullo, a que sean partícipes de esta fascinante manifestación religiosa, a que podamos hacernos notar más. Se lo dice un hermano que, orgulloso, cumplirá en la Semana Santa de 2011 veinticinco años con su hábito y su cirio delante del Señor de la Humildad y Paciencia.

¡COFRADE, VISTE TU HÁBITO!

     

Cádiz Cofrade. Jesús Manuel Sánchez Pavón. Marzo de 2011

 
 

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