Nacido en el sevillano Barrio de la Voluntad en 1966, José Antonio Navarro Arteaga, aparece hoy  como uno de los más firmes valores de la estatuaria procesional andaluza del siglo XXI. Una valiente personalidad artística y una atinada capacidad de síntesis para aprender la lección de los antiguos y nuevos maestros, constituyen alguna  de las cualidades de este escultor, traducidas en aportaciones donde la fuerza de carácter y el sentido del movimiento se concilian con el brío y la delicadeza inherentes a la estética andaluza.

 

Su andadura artística comienza a los dieciséis años en el taller de Juan Antonio González Ventura. Al emanciparse abre taller propio en la calle Magallanes, trasladándose posteriormente a su actual emplazamiento en la  popularísima  calle  Betis en Triana.          A raíz de un nacimiento de 32 piezas comienzan a sucederse los primeros encargos. Entre ellos la nueva efigie del Cristo del Amor en su Prendimiento (1992) para la cofradía del Perdón, sita en la parroquia jiennense de Cristo Rey. Con antelación, había realizado el paso de misterio de la Pollinica; obra juvenil que anuncia ya en algunos de sus pormenores la interesante evolución plástica posterior del artista.

        Navarro Arteaga tampoco ha olvidado el campo de la miniatura, donde se ha revelado como un artífice de exquisita sensibilidad y refinamiento a la hora de interpretar y extraer todas sus posibilidades plásticas a materiales tan dispares como la madera, el marfil o el barro. En esta faceta de su actividad sobresalen las esculturas de San Bartolomé, San Julián, San Marcos y San Antonio María Claret (1990) gubiadas para la  ornamentación del paso sevillano de Jesús Despojado, o las que labró para el trono malacitano del Descendimiento. En nuestra ciudad no ha quedado desapercibida esta faceta del autor, ejecutando con gran acierto y maestría las cartelas del Paso de Misterio de las Cigarreras, así como cuatro ángeles para las esquinas del Paso del Cachorro, y todo el exorno de tallas (ángeles, arcángeles y cartelas) para el Paso de Misterio de la Hermandad trianera de San Gonzalo.

 

Vía-Crucis de la Capilla de la Estrella (Sevilla)

 

        Punto y aparte es el Vía-Crucis (1995) para la Capilla Trianera de la Estrella, construido por un conjunto preciosista de catorce cartelas en terracota policromada. En todas ellas, la rotundidad de los tipos se integra en relieves pictóricos cuya complicación  de planos enaltece el potencial dramático y expresivo de unos personajes  apasionados muy en la línea de Luis Ortega Brú. Destacamos la pieza que posiblemente ha constituido su consagración definitiva: el Crucificado de la Pasión y Muerte, para la futura Hermandad de silencio de Triana; auténtico dechado de ternura, hedonismo, apostura y sobriedad salido de un artista inconformista y amante de la belleza.

        En el año 1995 realiza para la Hermandad de las Cigarreras un romano para el paso de Misterio, realizando otro para la ciudad de Málaga de similares características para la Cofradía de Salutación en 1997. Para la misma ciudad realiza la talla de cuatro Evangelistas de 90 cm, para las esquinas del Trono de la Hdad. de las Penas. En el mismo año realiza un Cristo Yacente para Umbrete (Sevilla).

En el año 1999 finaliza el Misterio de la Santa Cena para la ciudad de Almería, así como las cartelas del Paso de la citada Hermandad. En este mismo año estrena para nuestra ciudad el conjunto formado por un romano y un caballo para la Hermandad de la Lanzada. Realiza también la Imagen de una Virgen del Carmen para Almería, Cristo Cautivo para Úbeda, estando actualmente trabajando en las figuras del Misterio que lo acompañan (La Sentencia).         Como últimas obras realizadas destacamos por su composición y características la ejecución del Misterio de talla completa representando la Exaltación de Nuestro Señor para la ciudad de León (2000), así como otro de idénticas características para la ciudad de Lorca, representando la Coronación de Espinas (2001). Siguiendo esta línea ejecuta dos Imágenes de la Virgen María, doradas y estofadas al más puro estilo del barroco sevillano, una Milagrosa para el templo sevillano de los Paules, y una Imagen del Mayor Dolor para la Parroquia del mismo nombre en el barrio de la Barzola.

Señor de la Cena de Almería Fotografía: La Pasión Digital

        El año 2002 entrega dos Cristos  Crucificados para la ciudad gaditana de la Línea de la Concepción uno y otro para la ciudad de El Ejido, ambas obras de muy interesante factura. Para Sevilla realizó las imágenes titulares de la Hermandad sevillana del Divino Perdón del Parque Alcosa, calificadas por la prensa como “obras cercanas a las celebradas producciones de la Imaginería barroca”.  

Cristo de la Esperanza La Línea de la Concepción	Jesús del Divino Perdón Sevilla	Virgen de la Purísima Concepción Sevilla

 

        Como encargo para los próximos años destacamos el crucificado para la Parroquia de San Joaquín en Triana y otro, ya bendecido el pasado verano del 2002 para la del Mayor Dolor en la Barzola, ambas tallas para nuestra ciudad. Para las cofradías sevillanas realiza en 2003 las tallas secundarias del paso del Misterio de las Cigarreras, y tiene en proyecto la realización del misterio de la Estrella si el cabildo así lo decide. Fuera de la provincia de Sevilla numerosos son los encargos entre los que destacamos la Oración en el Huerto para la ciudad de Córdoba, Presentación para Jaén entre otros.

        Fuera del campo exclusivamente religioso destacamos el Trofeo que anualmente la Junta de Andalucía entrega en al “Pueblo Gitano”, el trofeo Ria Pitá de Canal Sur, el trofeo del programa el Llamador de Canal Sur, y el monumento a San Juan Bosco para la ciudad de Jerez. En la actualidad trabaja para varios proyectos dentro de este campo tanto para Sevilla como para otras, entre ellas Madrid. El pasado año participó en el concurso al monumento al diestro sevillano Curro Romero, quedando su boceto en primer lugar en número de votos realizados a través de Internet, y en segundo lugar en la decisión del jurado

        Tampoco tuvo suerte, aunque finalizó segundo en el concurso para la ejecución del monumento a Juan de Mesa y Velasco que figurará en la sevillana plaza de San Lorenzo, y que supone el tardío, pero merecidísimo homenaje al maestro cordobés.

        Recientemente, en el presente año ha sido bendecida la nueva imagen del Beato Cardenal Marcelo Spínola para la Hermandad del Gran Poder de Sevilla.

        Por último, mencionar su elección para la realización del conjunto escultórico para el paso de misterio de la Sentencia de Jerez (Cádiz), popularmente conocido como “la Yedra”.

 

Borja I. Peña Barranco